The Catholic Community of Northern Columbia County

“Será un padre para los habitantes de Jerusalén” (Isaías 22, 21)

Mayordomo del palacio: Era un título muy apetecido, y Sebna lo sabía; le concedia autoridad sobre la casa del rey y sus posesiones. Pero abusó de ese poder sacando ventaja de los beneficios e incluso construyendo una tumba lujosamente cavada para el mismo (Isaías 22, 16-18). Esa es la razón por la cual Dios despidió de su puesto a Sebna y estableció a Eliacin en su lugar. El Señor quería a alguien que ejerciera esa autoridad con interés y compasión paternal, no con autopromoción, dominación o codicia. Es decir, el
mayordomo del lugar debía imitar la forma en que Dios usa su autoridad: Sirviendo a su pueblo.

Estas palabras señalan algo importante sobre lo que Dios desea para su Reino. El Señor desea un reino donde los líderes no impongan su autoridad sobre las personas que están bajo su cuidado. Dios desea que muestren compasión e interés por su pueblo (Mateo 20, 25-26).

Jesús concedió a Pedro esa clase de autoridad, recibió “las llaves del reino” y el poder de atar y desatar. Pero primero y lo que es más importante, él sería la roca, el cimiento sólido sobre el cual la Iglesia está construida. Pedro no sería elevado por encima de sus hermanos; sino que estaría debajo de ellos para sostenerlos.

Esa es la clase de liderazgo que Dios desea que ejerzan los padres y  cualquier persona que tenga un puesto de autoridad. En su Reino, en lugar de ponerse unos por encima de los otros, las personas se sirven unas a otras con amor, respeto y honor. Amen.